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18/12/2025 | EAPN - Actualidad
Las familias en riesgo de pobreza y exclusión social en España destinan casi el 60 % de su gasto total a cubrir alimentación y vivienda, una situación que evidencia la pérdida de poder adquisitivo y la imposibilidad de garantizar unas condiciones de vida dignas en un contexto de sucesivas crisis e inflación persistente. Así lo revela el Informe ‘La cesta de la compra de familias en riesgo de pobreza y exclusión social’ publicado este 18 de diciembre la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES).
El estudio -elaborado a partir de la Encuesta de Presupuestos Familiares del INE, y de los testimonios de personas con experiencia en pobreza y las aportaciones de diferentes expertas, muestra cómo los hogares con menos ingresos dedican el 40,9 % de su gasto a vivienda y suministros, y el 18,7 % a alimentación, dejando un margen mínimo para el resto de las necesidades básicas, entre ellas transporte, sanidad, educación, vestimenta, el ocio o la vida social.
De hecho, la presión económica obliga a reducir drásticamente o eliminar productos más caros y percibidos como menos necesarios, entre ellos pescados, carnes de alto coste como la de bovino, productos de charcutería y alimentación para bebés.
“Las personas en pobreza no gastan más: renuncian a derechos. El problema no es cómo gestionan sus recursos, sino que los ingresos y las políticas públicas no cubren el coste real de vivir con dignidad”, señalan desde EAPN-ES.
ALIMENTOS SANOS Y VIVIENDAS ASEQUIBLES, CADA VEZ MÁS DIFÍCIL
El informe refleja cómo la subida del precio de los alimentos y del acceso a la vivienda impacta de forma más preocupante en los hogares más vulnerables. La compra de alimentos se basa en estrategias de frugalidad, priorizando productos baratos y calóricos frente a opciones nutricionalmente recomendables. Carnes de mayor calidad, pescado fresco, frutas, hortalizas, y alimentos específicos para bebés se reducen o eliminan por su coste, lo que genera riesgos de déficit nutricional, especialmente en hogares con niñas, niños y adolescentes.
En paralelo, el acceso a una vivienda digna se consolida como uno de los principales factores de empobrecimiento. El alquiler absorbe una parte creciente del presupuesto familiar, mientras que la pobreza energética obliga a muchas familias a elegir entre calentar el hogar o llegar a fin de mes.
REFORZAR DERECHOS Y PROTECCIÓN SOCIAL
Para EAPN-ES, el Informe constata la habitual situación de emergencia a la que tienen que hacer frente las personas en situación de pobreza. Los resultados de la investigación señalan como causas principales los factores económicos –especialmente el precio de la vivienda–, pero también la carga del tiempo que impide una planificación más eficiente y el autocuidado; la discriminación de género; y las desigualdades territoriales.
En este sentido, desde la Red reclaman una respuesta política estructural que incluya medidas para garantizar el derecho a la vivienda, el refuerzo del bono social energético, asegurar una alimentación saludable y accesible, proteger los servicios públicos como pilares fundamentales de la inclusión social, y aplicar una perspectiva de género en todas las políticas de gasto y cuidados.
LOS GASTOS COMO INDICADORES DE POBREZA
Uno de los principales aportes del informe es el enfoque desde los gastos. Frente a la medición tradicional de la pobreza basada en los ingresos, EAPN-ES señala la necesidad de incorporar el análisis de los costes reales de la vida, para determinar patrones de consumo real y definir así una cesta de bienes y servicios básicos que cubra las necesidades elementales de la población.
A su vez, con los resultados de la investigación, desde la entidad buscan sentar las bases para la construcción de los conocidos como presupuestos de referencia (reference budgets) y para crear, a futuro, un Índice de Precios de Consumo (IPC) adaptado a las condiciones específicas de las personas en situación de pobreza. Estas dos herramientas permitirían “una medición más justa y precisa del impacto de la inflación y el coste de la vida en los hogares más vulnerables”, aseguran desde EAPN-ES.