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29/12/2023 | EAPN - Actualidad
El presente año ha estado marcado por las diferentes convocatorias electorales. Los Gobiernos emanados de las urnas -junto con los que saldrán en los comicios previstos en 2024-, tienen por delante retos inaplazables en materia de derechos y políticas sociales, en un nuevo modelo social donde la pobreza, la exclusión social y la desigualdad perduran como desafíos constantes y multidimensionales.
Aunque la salida de las últimas crisis ha sido muy diferente a la tomada en 2008, lo cierto es que la pobreza y la exclusión social siguen siendo un problema pendiente que afecta a 12,3 millones de personas en nuestro país, según los datos del XIII Informe ‘El Estado de la Pobreza en España’ de EAPN-ES.
El coste de la vivienda, la brecha de género y el apoyo insuficiente a las familias con menores se han constituido como factores clave para la generación de pobreza en España. La recuperación de las familias se está viendo lastrada por los efectos de la inflación, el precio de la energía, y unos alquileres e hipotecas en constante alza, lo que impide que millones de personas puedan tener una vida en condiciones dignas.
El último Consejo de ministros del año ha aprobado la prorroga de algunas de medidas sociales incluidas en el ‘Escudo social’, entre ellas las ayudas al transporte, el IVA reducido de los alimentos de primera necesidad o la prohibición de los desahucios de personas vulnerables hasta 2025. Desde EAPN-ES aplaudimos esta decisión, pero debemos ser más ambiciosos.
En 2024, EAPN-ES cumple veinte años de su refundación, dos décadas defendiendo los derechos sociales como barrera imprescindible frente a la pobreza. Como Red, queremos plantear a lo largo de estos doce meses un debate estratégico clave que afronte los desafíos del contexto histórico presente y futuro, con el objetivo de seguir avanzando en igualdad, tolerancia y justicia social, en colaboración estrecha con las instituciones.
Como hemos visto, las cifras constantes y elevadas de pobreza demuestran que nos encontramos ante un problema estructural, que requiere de abordajes más amplios y a todos los niveles territoriales. En 2024, vamos a trabajar para establecer de forma prioritaria un Pacto Estatal de Prevención y Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social con un consenso amplio del arco parlamentario. Y, por supuesto, que se retomen las medidas estancadas por el adelanto electoral, como la Ley de Familias, el desarrollo normativo de la Ley por el Derecho a la Vivienda, o las mejoras urgentes en el ingreso mínimo vital.
EL AÑO DE UNA EUROPA SOCIAL
2023 ha sido también el año de la Presidencia española del Consejo de la UE, con un marcado perfil social donde se han tratado retos importantes como la emergencia habitacional, la garantía de ingresos, la crisis migratoria, o una fiscalidad justa, que no pueden quedar solo en declaraciones de buenos propósitos.
Una Europa igualitaria solo puede construirse poniendo en el centro la paz y los derechos humanos, con políticas que garanticen la vivienda y el acceso a la energía, los ingresos, la igualdad de oportunidades y de género, la atención a la diversidad, los retos ante el fenómeno migratorio, y la lucha contra todas las formas de discriminación, incluida la aporofobia, con la vista puesta en los nuevos desafíos en este ámbito que presentan progresos tecnológicos como la inteligencia artificial.
Este año que comienza, la UE afronta los comicios al Parlamento Europeo, en un contexto de crisis no superadas y creciente inestabilidad internacional, cuyos efectos impactan en mayor medida en las personas en situación más vulnerable. No podemos olvidar que la pobreza y la exclusión social afectan al 21,6 % de la población europea, 95,3 millones de personas, según Eurostat.
Hace unas semanas se publicaban los resultados de la encuesta de otoño 2023 del Eurobarómetro, donde se ha valorado el interés por las próximas elecciones de junio y los temas que la ciudadanía supone prioritarios. En este sentido, más de un tercio de la población de la UE considera que la lucha contra la pobreza y la exclusión social (36 %) es el tema principal al que debe dar prioridad el Parlamento Europeo. Igualmente, una mayoría (57 %) está interesada en la convocatoria electoral de 2024, 6 puntos más que en la encuesta de 2018.
Estos datos demuestran que la sociedad está preocupada por su vida y sus realidades diarias. Las elecciones europeas de 2024 son una oportunidad para seguir avanzando contra la desigualdad, con unas Instituciones que apuesten firmemente por una transformación social, económica y ambiental justa y sostenible, al servicio de las personas.
No podemos despedir 2023 sin denunciar también las vulneraciones insoportables de derechos humanos que estamos presenciando en las crisis migratorias y en los diferentes conflictos bélicos, en los que copan portadas y en los olvidados por las agendas políticas y mediáticas. En estos momentos, exigimos firmeza y responsabilidad a las Instituciones. Europa debe liderar la defensa de los derechos humanos, de la paz y la democracia, apoyando el cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Estas son fechas de propósitos para el año que comienza. Sin embargo, los derechos no pueden ser solo deseos. Los derechos deben ser realidades incuestionables, y garantizarlos depende de la voluntad política, no solo de los diferentes Gobiernos, también de todos los cargos elegidos democráticamente, que tienen una responsabilidad con la ciudadanía.
Hemos atravesado años difíciles, y el papel del Estado ha sido fundamental para evitar que la pobreza alcanzase a muchas más personas. Sin políticas de protección social ni pensiones públicas, el número de personas en situación de pobreza se duplicaría, llegando a afectar a casi la mitad de la población. Pero hay millones que aún no han visto sus problemas resueltos.
Desde EAPN-ES, queremos recibir este 2024, el año de nuestro 20º Aniversario, con el firme compromiso de seguir luchando contra la pobreza y la exclusión social, para que la paz, los derechos humanos, la igualdad y la justicia social sean los pilares de una vida digna para todas las personas.